24 de julio de 2008

http://www.andalucia.cc/adn/plumbeos.htm

LOS LIBROS PLÚMBEOS DE GRANADA

Los Libros Plúmbeos, tan desconocidos como confusa la información que se publica sobre ellos, están ya en Andalucía. El 17 de junio de 2000 el Arzobispo de Granada, Antonio Cañizares Llovera, los recibió en Roma de manos del cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (antiguo Santo Oficio).

Resulta que tras la caída del reino andaluz de Granada en manos castellanas y las consiguientes persecuciones de los cristianos hacia los musulmanes, parece que un grupo de moriscos (musulmanes conversos al cristianismo), idean un método para conseguir ser reconocidos como castellanos viejos en una sociedad que condenaba a judíos, musulmanes y conversos.
Así el 15 de marzo de 1595 el buscador de tesoros Sebastián López, de Jaén, encuentra en una cueva de las laderas de Valparaíso una lámina de plomo con unas inscripción en latín que decía "Cuerpo quemado de San Mestión martir. Fue martirizado en tiempo dle imperio de Nerón".
Comunicado el hallazgo al arzobispo de Granada, Pedro de Castro, los acontecimientos se precipitan al aparecer días después una segunda lámina com lápida de San Hiscio, discípulo del Apóstol Santiago. El arzobispo ordena nuevas búsquedas y "aparecen" huesos, una calavera, y el primer libro, "De Fundamentun Eclesiae", de plomo, redondo, del tamaño de una hostia y escrito en cinco hojas por amas caras, con caracteres y puntos apenas legibles. En días y años sucesivos, hasta 1599 aparecerán nuevas láminas, que suministraban las primeras noticias concretas acerca del santo granadino San Cecilio martirizado junto a doce compañeros por los romanos.
La Iglesia acoge con entusiasmo estas reliquias causando gran revuelo en la época y reconoce en un sínodo que las reliquias pertenecían a discípulos de los Apóstoles martirizados en la antigua Ilíberis por orden del emperador Nerón. De esta forma los cristianos viejos entroncaban con su pasado tras ocho siglos de paréntesis musulmán, y los moriscos creían tener justificación para no ser expulsados de la tierra que les vio nacer, por ser ellos descendientes de aquellos mártires. Es decir un morisco demostraba que era tan viejo como un castellano viejo pues descendía de San Cecilio y otros mártires que murieron con él en la época romana, luego por la invasión musulmana adoptó el Islam y siglos después cuando la "reconquista" cristiana volvía a ser cristiano. Ver documentos relacionados sobre los moriscos dentro de ADN.libros plúmbeos
Expertos moriscos como Miguel de Luna y Alfonso del Castillo, junto a castellanos como el Marqués de Estepa o canónigos y catedráticos, intentan traducir las inscripciones.
Estos libros, que de ser ciertos echaban por tierra tantas doctrinas de conquistas y expulsiones, fueron trasladados a Madrid en 1631 y desde allí en 1642 a Roma para su estudio, siendo declarados falsos y heréticos por el Santo Oficio en 1682, permaneciendo ocultos y en la leyenda hasta que finalmente el Vaticano los ha reintegrado a Granada para su estudio y admiración en este junio de 2000.
Parece ser que los libros y reliquias no eran del siglo III sino del XVI por lo que no eran "auténticos" , sin embargo lo ideal sería que la Universidad de Granada pueda estudiar los libros y darnos una versión actualizada y más científica del contenido de los plúmbeos.

A continuación y como complementeo la moción que presentó Izquierda Unida en el Parlamento de Andalucía. De buen fin pero de débil argumento.

El Grupo Parlamento de IZQUIERDA UNIDA LOS VERDES-CONVOCATORIA POR ANDALUCIA
(IU LV-CA), con arreglo a lo previsto en el artículo 165 y siguientes del Reglamento de la Cámara, formuló el pasado 19 de Noviembre, (de 1999) la siguiente proposición no de ley en la comisión de Cultura, Turismo y Deportes (asentado en el libro de Registro de Entrada con el Nº 11006) relativa a la recuperación de los libros plúmbeos del Sacromonte granadino.

Exposición de motivos



En el último tercio del siglo XVI en Granada seguía vigente la división entre cristianos viejos y cristianos nuevos, es decir, entre moriscos y no moriscos y ya se vislumbraba la "solución final" a la castellana que a principios del siglo XVII se pondrían en marcha en todos los reinos unificados por los Reyes Católicos.

Ello unido a que en la recientemente "reconquistada" Granada había una verdadera necesidad de justificar la llamada reconquista con una inexistente tradición cristiana, hizo que, muy posiblemente, un grupo de moriscos cultos
granadinos (con la nobilísima causa de conseguir la libertad) utilizasen la imaginación en su lucha contra la intolerancia del nuevo estado basado en la uniformización de la lengua, la religión y las costumbres.

Desde 1.588, y en un ensayo general que dio muy buen resultado, "aparecen" entre los escombros de la llamada Torre Vieja de la mezquita mayor nazarí una caja de plomo con varios objetos y un pergamino escrito en árabe, castellano y latín que suministraba las primeras noticias concretas acerca de San Cecilio.

Tras el éxito obtenido y desde 1.595 "aparecieron" veintidós libros plúmbeos que son, según el doctor Miguel José Hagerty, "el último testimonio escrito en la lengua árabe de la civilización andalusí ya en su penosa fase final: la morisca".

En 1.631 estos documentos fueron trasladados a Madrid y desde allí a Roma para su estudio. Allí siguen estos documentos granadinos que son parte de nuestra historia.

BIBLIOGRAFIA:

GABRIEL POZO. Diario IDEAL de Granada. 18 de junio de 2000